Contador asegura que no sabe quién está más nervioso, Andy Schleck o él

Contador, después de tener "un buen día en la Madeleine y también Mende", asegura que hay que mantener la prudencia. "Aquí, igual que tienes un buen día, te puede venir uno malo y en los Pirineos, con la dureza que tienen, la cuestión va a ser más no fallar que incluso sacar diferencias de tiempo", dijo.

Los 10 segundos de Mende "no son muchos, pero nunca se sabe si pueden ser definitivos al final. Psicológicamente fueron bastante buenos". A pesar de lo cual asegura que ve a Andy Schleck "bastante bien. Hemos hablado muchas veces y lo conozco bien. Es un hombre que no se da por vencido, seguro que tiene ganas de que llegue otra vez la montaña para ver qué puede hacer", comentó el doble vencedor del Tour de Francia.

Contador se plantea una táctica poco complicada para afrontar los Pirineos ante los previsibles ataques de Schleck. "Mi situación es buena. Si no veo las cosas claras no probaré a atacar, porque mi posición respecto a la de Andy es buena y no voy a arriesgar más de la cuenta", señaló.

"Andy Schleck debe intentarlo más que yo en la montaña", afirmó Contador sin dar mucha importancia a los nervios que dice verle su rival. "No sé exactamente quién está más nervioso, si él o yo", respondió.

Su análisis de las cuatro etapas de Pirineos no ha cambiado. "Como dije antes de comenzar el Tour, los Pirineos serán los jueces de la carrera. Espero tener buenas sensaciones, porque cada día me voy encontrando mejor. Espero aprovechar estas etapas tan duras para sacar diferencias de tiempo y, si es posible, ponerme por delante de Andy Schleck".

Tras reconocer las cuatro etapas pirenaicas, Alberto Contador conoce perfectamente los recorridos. "La primera tiene un puerto durísimo, Palhieres, con porcentajes enormes y una rápida bajada antes de la subida a Ax 3 Domaines, corta pero dura. Las diferencias van a ser muy amplias".

"El día siguiente está marcado por la subida a Balés, un puerto largo y muy duro al final, con una bajada muy mala. Es una etapa similar a la de la Madeleine. Puede haber ataques y gente que se la juegue bajando. La etapa de Bagneres de Luchon-Pau será un día complicado, porque empieza con la subida al Peyresourde a balón parado y luego habrá que superar el Tourmalet y el Aubisque, aunque desde allí todavía quedarán 60 kilómetros hasta la meta", señaló.

"Veremos qué movimientos hace la gente, porque es complicado llegar. Por último está la llegada al Tourmalet, que es de la que todo el mundo habla, con dos puertos antes, Marie Blanque y Soulor. Ese día habrá que mirar la clasificación para decidir qué hacer. Pero en general lo más importante será no tener un día malo en Pirineos, porque si no echas al traste todas las opciones. Eso es lo más peligroso", dijo.

Alberto Contador cree que, frente a Andy Schleck, el posible duelo se presenta "bastante igualado. Un día está uno mejor que el otro y al revés. Pero es cierto que tengo cierta tranquilidad con la contrarreloj de Burdeos, para el caso de que no sea capaz de sacarle diferencias o incluso de que él me saque algo más", señaló.

Y del resto de rivales, Alberto dice que hay un grupo de corredores "con un nivel altísimo, pero lo peligroso van a ser los movimientos desde lejos, porque en los últimos puertos las diferencias que pueden sacar no son demasiado amplias", concluyó.