Armstrong baja de los cielos

Lance Armstrong, que sufrió ayer dos caídas, se queda enganchado entre los accidentados Velasco y Egoi Martínez FOTO: AFP

En la primera etapa de alta montaña Lance Armstrong dijo adiós al Tour. Toda la suerte que tuvo de cara durante siete Tours consecutivos se le evaporó ayer, cuando llegó a la meta de Morzine Avoriaz a 11'45" de Andy Schleck, el vencedor de etapa, y cuando Cadel Evans se vestía de amarillo el tejano todavía no había cruzado la línea blanca.

No hubo ataques entre los grandes; el tremendo calor y las subidas fueron suficientes para hacer la selección. El menor de los Schleck ganó la etapa que le regaló Samuel Sánchez, que desperdició una oportunidad de oro para ganar por primera vez en el Tour.

Alberto Contador cedió 10" respecto a Schleck, sin duda el peor rival que va a tener en la montaña, pero se fue al hotel con la satisfacción de comprobar que tiene equipo para la montaña, después del excelente trabajo realizado por Vinokourov, Tiralongo y, sobre todo, un Dani Navarro soberbio que marcó un 'tempo' tremendo en la subida a Morzine.

Ya en el km. 6 Armstrong tuvo un aviso cuando tuvo que echar pie a tierra ante una caída en la que se vieron afectados Evans y Pineau, líder de la montaña. Pero fue en una rotonda antes de encarar las primeras rampas de La Ramaz cuando todas sus ilusiones se desvanecieron. Ni la ayuda de sus compañeros Brajkovic y Popovych logró reintegrarlo a un pelotón en el que los Sky, por medio de Flecha, marcaron un ritmo muy alto no se sabe muy bien por qué. Si lo hicieron para Wiggins se equivocaron porque el británico se descolgó en la subida a Morzine, cuando la máquina azul celeste de Astana se puso en marcha.

En La Ramaz se quedó también Sylvain Chavanel, el hombre al que los maillots amarillos le caducan al día siguiente. Cuando los Saxo Bank quitaron a los Sky de la cabeza del pelotón quedó claro que Andy Schleck iba fuerte. Pero a Chris Anker Sorensen y Jakob Fuglsang se les encendió pronto la luz de la reserva y entonces se vio a un Schleck nervioso, bajando a su coche a pedirinstrucciones. Falto de su hermano Frank, que es quien le lleva de la mano y quien sabe leer bien la carrera, Andy se siente huérfano.

Exhibición de Astana

A mitad de La Ramaz y hasta el final ya no hubo más que un equipo, el Astana. Por la cima de ese puerto Armstrong ya perdía un minuto y tenía esperanzas de enlazar. Pero un nuevo incidente a punto de coronar Les Gets, un tercera previo a Morzine, le disuadió que este Tour no va a ser suyo. Los Euskaltel Iván Velasco, que ayer fue padre, y Egoi Martínez se engancharon al coger un bidón y se cayeron delante del tejano, que no llegó a irse al suelo pero perdió cualquier opción a enlazar.

Hasta el final no hubo más que un rosario de gente perdiendo contacto con el grupo principal bajo el impulso de los Astana y la absorción de los tres supervivientes de la fuga del día, Aerts, Moinard y Moerenhout. Un ataque de 'Purito' Rodríguez a 8 kms. de meta no fue más que fuego de artificio y a falta de dos hubo varias ofensivas a las que Contador respondió equivocándose, gastando unas fuerzas que echaría a faltar un km. más adelante, cuando Schleck atacó y 'Samu' le respondió para fallar a la hora de la verdad